La Ruidera invernal

La excelente situación «ambiental» de las Lagunas de Ruidera gracias al buen año pluviométrico, que ha devuelto a este espacio natural un paisaje que no se observaba desde hace décadas, atrae a numerosos turistas a contemplar sus cascadas, que desde enero del año pasado no dejan de verter agua. Una atracción que ha permitido que este pueblo de la provincia deje de ser únicamente conocido como destino veraniego para el baño y amplíe su temporada turística más meses al año.

La propia directora de este parque natural, María Luisa Colmenero, confirma que las 16 lagunas se encuentran «a niveles máximos», al igual que el año pasado, y, de momento, sin problemas de desbordamientos como ocurrió en 2010 y sí con nuevas zonas por descubrir por los turistas, como es el caso de las lagunas del Sabinar o las Hazadillas, que muchas veces han pasado desapercibidas para los visitantes por la inexistencia de agua.

La cifra de turistas se mantuvo en el medio millón en 2010, aunque tanto desde el Ayuntamiento de Ruidera como desde la dirección del parque natural reconocen que se acerca más gente a ver las lagunas, sobre todo del entorno. «Llama la atención la situación, donde todo el agua está laminando por las represas y se ven todas las cascadas. Claro que tiene su atractivo y resulta más llamativo», aclara Colmenero, quien cree que esta llegada de turistas se debe sobre todo «al boca a boca» y a las nuevas tecnologías: «Siempre ha pasado, cuando las lagunas han subido los niveles, estadísticamente está comprobado que las visitas aumentan».

La Junta de Castilla-La Mancha, administración encargada de la gestión de esta zona protegida, defiende que este incremento del turismo no debe estar reñido con su conservación, aunque para el alcalde de Ruidera, Pedro Reinosa, «no viene tanta gente como nos gustaría». Tanto el regidor como el portavoz de la Asociación de Empresarios Lagunas de Ruidera, José Luis López, aseguran que muchos establecimientos turísticos cuelgan el cartel de «completos» los fines de semana, puentes y en las fiestas navideñas, aunque no ocurre lo mismo entre semana. Respecto al perfil del visitante, no hay nada establecido, «desde excursiones organizadas, gente de la zona que viene a pasar el fin de semana o personas de cualquier punto de la Península que eligen este destino para sus vacaciones de invierno», explica López.

Pero a la vez que llegan más visitantes también se trabaja por ofrecer nuevas posibilidades. «Nosotros intentamos que el parque natural haga algún tipo de inversiones, se promuevan diferentes rutas de senderismo que prácticamente la gente no conoce, que se pueda acceder a zonas del parque están prohibidas ahora, se hagan observatorios de aves y se mejoren los caminos que hay dentro de este espacio, que están hechos una pena», comenta Reinosa, quien recalca que ha solicitado que se arreglen esas vías, aunque «la verdad es que no nos dan buenas noticias». «Se pueden hacer muchísimas cosas dentro del parque para que el visitante no tenga solo la opción de venir y darse un baño. Yo creo que Ruidera, a lo largo de todo el año, reúne muchas condiciones para que cualquier persona pueda venir y disfrutar no solo de lo que es el baño», apunta el alcalde. Sobre estas demandas, la directora del espacio natural asegura que «para andar no hay problema si la gente quiere hacer senderismo». «Los caminos que están para este fin, que hay cinco o seis, incluida la Ruta del Quijote que es su uso preferente» se pueden utilizar, aunque reconoce que hay algunos que «se han puesto mal» porque ha llovido «muchísimo y han tenido muchos arrastres». «Ahora algunos se arreglarán, sobre todo esas zonas que se han deteriorado y que de alguna manera puedan interferir en el uso público», añade.

También los empresarios se plantean nuevos proyectos para promocionar el parque. El primero de ellos se celebra entre hoy y mañana con el encendido de las hogueras de San Antón y la elaboración de los platos tradicionales de la zona para que puedan ser degustados por los visitantes. «Hay bastantes más iniciativas de las que ya hemos informado a la Junta para que puedan ser incluidas en el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG)», señala el portavoz de la asociación.

futuro del parque. Precisamente ese documento que se está elaborando en la actualidad marcará el futuro de las Lagunas de Ruidera en todos sus aspectos, aunque todavía no se conoce cuándo estará concluido, «porque es un proceso largo», explica Colmenero. El alcalde también cree que este plan se debe modificar: «Parece ser que estamos en el buen camino de cambiarlo, porque el actual es muy antiguo y hay muchas cosas nuevas que se pueden añadir».

Otro de los puntos de interés de Ruidera es la laguna de Santos Morcillo, cerrada al uso público desde enero de 2007. Desde el parque descartan pronunciarse sobre su reapertura hasta conocer los informes de los ingenieros de la UCLM. Por su parte, el alcalde afirma que «las últimas noticias» de las que disponen son que «no se está detectando ningún tipo de movimiento en la grieta». «Yo creo que si los estudios que se están haciendo son favorables, se debería abrir cuanto antes, porque de cara al verano es una de las lagunas que mejor funciona», concluye Pedro Reinosa.